El constitucionalismo, en un sentido estricto, es la práctica de un gobierno limitado provocado por la existencia de una constitución. Se puede decir que existe constitucionalismo en este sentido cuando las instituciones gubernamentales y los procesos políticos están efectivamente limitados por las normas constitucionales. En un sentido más amplio, el constitucionalismo se refiere a un conjunto de valores y aspiraciones políticas que reflejan el deseo de proteger la libertad mediante el establecimiento de controles internos y externos del poder gubernamental. Suele expresarse en apoyo de las disposiciones constitucionales que establecen este objetivo; en particular, una constitución codificada, una declaración de derechos, la separación de poderes, el bicameralismo y el federalismo o la descentralización. El constitucionalismo es, pues, una especie de liberalismo político.