Acento de Intensidad

Acento de Intensidad

1. Clasificación de las palabras por el acento

En cada palabra pronunciada aisladamente hay siempre una sílaba acentuada. Según cuál sea ésta, se dividen las palabras en agudas (u oxítonas), las que llevan el acento en la última; graves (o paroxítonas), las que lo llevan en la penúltima; y esdrújulas (o proparoxítonas), las que lo llevan en la antepenúltima; en palabras compuestas por adición de pronombres, el acento puede alejarse todavía más de la sílaba final: ‘adviérteselo’; estas palabras se llaman sobresdrújulas. Las palabras graves están en español en mayoría, con una gran desproporción, respecto de las otras, circunstancia a la que se atribuye, en parte, la particular gravedad y equilibrio de este idioma.

2. Importancia de colocar correctamente el acento

En español es particularmente importante pronunciar las palabras con el acento correctamente colocado; hay muchas de significado totalmente distinto, según la sílaba en que lo llevan: ‘deposito, depósito’ y ‘depositó’; a menudo, una palabra mal pronunciada en cuanto al acento es incomprensible, y, en todos los casos, denuncia al extranjero. Sin embargo, el acento de las palabras aisladas no constituye en general una dificultad en la lectura del idioma, pues obedece a reglas fijas y sencillas y las excepciones de estas reglas se marcan en la escritura con el acento ortográfico.

3. El acento en las palabras polisílabas

Las reglas de acentuación de palabras de más de una sílaba son éstas: se pronuncian graves las palabras acabadas en vocal o en consonante s o n: ‘pila, sombrero, pesebre, paredes, cables, pasan, corren’. Se pronuncian agudas las palabras de más de una sílaba acabadas en consonante que no sea n o s y las acabadas en y cuando ésta sigue a vocal fuerte, aunque suene como vocal: ‘ciudad, carcaj, pedal, vivir, estoy, carey, maguey, virrey’. Las excepciones de estas reglas, como se repetirá en acento ortográfico, llevan el acento escrito, así como también lo llevan siempre las palabras esdrújulas, pues ninguna palabra sin acento escrito se pronuncia esdrújula.

4. El acento en las palabras monosílabas y en las partículas

La dificultad para el que aprende el idioma puede estar no en la acentuación de las palabras aisladas, sino en la frase; particularmente, en la de los artículos, ciertos adjetivos y adverbios, las preposiciones y las conjunciones, tanto monosílabas como bisílabas, que unas veces tienen acento propio y otras veces son enclíticas o proclíticas.

5. Reglas generales de acentuación

Como las reglas completas sobre esta materia harían excesivamente complicado y enredoso este artículo, se da en el mismo diccionario la acentuación de las palabras dudosas en los artículos correspondientes y se incluyen aquí algunas reglas generales y otras referentes a casos que no pueden particularizarse para cada palabra y que el acento ortográfico no ayuda a determinar, agrupadas para cada clase de palabras.

5.1. Se conserva el acento en el plural

Las palabras plurales conservan generalmente el acento en el lugar en que lo llevan las singulares correspondientes; lo que hace que las palabras agudas acabadas en consonante se transformen en llanas y las llanas en esdrújulas, circunstancia que queda reflejada en la escritura: ‘Galanes. Árboles’. Excepciones son carácter-caracteres y régimen-regímenes.

5.2. Palabras compuestas

Las palabras compuestas se pronuncian sólo con el acento del último elemento: ‘[carricóche, agridúlce, aguamános, cortafuégo, sabelotódo, italoalemán]’.

6. Reglas particulares

6.1. Nombres

6.1.1. Nombres propios compuestos

Se pronuncia proclítica la primera parte de los nombres compuestos de persona: ‘Juan José [juanjosé]’; también en los nombres geográficos si es llana y no de más de dos sílabas: ‘Puente la Reina [puentelarréina]’; pero no pierde su acento si es aguda o de más de dos sílabas: ‘Villar del Arzobispo [billár delarzobíspo]. Alcázar de San Juan [alcázar desanjuán]’.

6.1.2. Nombres en vocativo

En un vocativo se pronuncia invariablemente proclítica la primera palabra de la invocación, insulto, mimo, etc.: ‘[¡cielomío! ¡caradetónto! ¡cuatroójos!]’.

6.1.3. En expresiones adverbiales

Los nombres pierden su acento propio en expresiones adverbiales: ‘[cuestarríba]’.

6.1.4. Palabras de tratamiento

Se pronuncian proclíticas las formas de tratamiento don, doña, fray, sor, san, santo, -a, mosén, señor, -a, señorito, -a, padre, madre, hermano, -a, tío, -a, usadas como tratamiento precediendo a un nombre en vocativo: ‘[¡ermanoantónio! ¡señoritoalbérto!]’; pero en otra forma conservan su acento propio: ‘[lamádre superióra]’.

6.2. Verbos

Los verbos, si son bisílabos, se pronuncian siempre con su acento propio, aunque sean auxiliares: ‘El proyecto había sido aprobado [elproyécto abía sído aprobádo]’. Las formas monosílabas de haber y ser, en lenguaje rápido, se apoyan en la palabra anterior si ésta es acentuada: ‘Mi hermano ha venido a eso [miermán(oa) benído aéso]’. Pero si la palabra anterior es inacentuada, ésta es la que se apoya en el verbo monosílabo: ‘No ha dicho nada [n(oá) dícho náda]’. (V. en acento ortográfico de este apéndice el caso de las formas verbales con pronombre enclítico.)

6.3. Adjetivos

6.3.1. Adjetivos numerales

Los numerales simples se pronuncian siempre con su acento. En los compuestos, la regla general es que se pronuncie acentuado sólo el último: ‘[treintaicínco, cientocincuentaiséis]’. Son excepciones mil y millón, que conservan su acento en todos los casos (‘[míl dosciéntos, trés millónes cuatrociéntos míl]’), y cien y ciento, que lo conservan siempre, excepto delante de mil: ‘[dosciéntos cincuénta, cién millónes]’. (Pero, en cambio, ‘[cienmíl cuatrociéntos] y [cuatrocientosmíl]’.)

6.3.2. Adjetivos posesivos

Los adjetivos posesivos antepuestos al nombre pierden siempre su acento: ‘[micása, buestrostíos]’. (En algunas provincias castellanas se pronuncian acentuados.)

6.3.3. Adjetivos demostrativos

Los adjetivos demostrativos conservan su acento: ‘[ésa chiquílla]’.

6.3.4. Adjetivos indeterminados

De los adjetivos indeterminados solamente pierde el acento cada: ‘[cadadía]’.

6.3.5. Adjetivos restantes

Los demás adjetivos conservan su acento, tanto si van antepuestos al nombre como si van pospuestos o con cópula: ‘[buéna merienda; día ermóso, micás(ae)s túya]’.

6.4. Adverbios

Se pronuncian proclíticos los adverbios como, cuando, donde, cuando hacen oficio de conjunciones, y el adverbio tan: ‘[está comolodejáste; tanbuéno comotú]’. En cualquier otro caso y cualquier otro adverbio conservan su acento.

6.4.1. Adverbios en -mente

Los adverbios en -mente se pronuncian con dos acentos: ‘[cláraménte]’. También ‘[asímísmo]’ (escrito, asimismo).

6.5. Pronombres

6.5.1. Pronombres personales

De los pronombres personales son proclíticas todas las formas antepuestas al verbo que no son sujeto, y enclíticas las pospuestas sin preposición: ‘[melodirás luégo; escríbenos prónto; házles benír]’. En cualquier otro caso conservan su acento: ‘[élla lo sabrá; díselo a él]’.

6.5.2. Pronombres relativos

De los pronombres relativos, cual y cuales se pronuncian acentuados cuando llevan artículo o son interrogativos (en este caso lo llevan escrito). Los otros se pronuncian con acento (que además va escrito), como interrogativo-exclamativos, y sin él en los demás casos.

6.6. Partículas

Los artículos, preposiciones y conjunciones son generalmente proclíticos. Un, una, cuando van entre dos sílabas acentuadas se unen indistintamente a cualquiera de ellas: ‘[cortárun árbol]’ o ‘[cortár unárbol]’.

Fuente: Diccionario María Moliner de uso del español