Antónimo

Antónimo

En español es muy reducida la posibilidad de formas antónimas con el prefijo anti- u otros. De aquí que para definir un antónimo haya que recurrir a la perífrasis falto de, que, en muchos casos, no es exacta, pues el antónimo que se trata de definir expresa una cualidad positiva y no meramente la falta de otra; por ejemplo, decimos que grosero significa «falto de amabilidad», cuando, en realidad, es lo contrario de amable.

Fuente: Diccionario María Moliner de uso del español