Elipsis

Elipsis

La elipsis se produce continuamente, tanto en el lenguaje escrito como en el hablado; tanto en el lenguaje familiar como en el literario; y es un factor de tanta importancia en la construcción y el estilo, que merece estudio detenido.

Las notas que siguen se refieren a la elipsis en general y a los casos en que afecta a una oración entera y no a una sola palabra; queda para los artículos correspondientes lo relativo a la elipsis de una clase determinada de palabras. Es particularmente interesante la elipsis en las frases comparativa, exclamativa y de relativo, y de ella se trata también en el lema exclamar (V. formas de expresión) y en este apéndice gramatical en comparación y relativo.

Algunas elipsis son no sólo permitidas, sino obligadas: ‘Trae el abrigo del niño y el (abrigo) mío’: no sería correcto repetir abrigo. Otras veces, la elipsis es, si no obligada, recomendable: ‘Para la buena administración y (el buen) gobierno del municipio’. Otras, es usual y correcta, tanto en el lenguaje escrito como en el hablado: ‘Yo llevaba zapatos y ellos (llevaban) botas’. Hay casos en que, aunque usual en el lenguaje hablado, no es recomendable en el escrito. (V. más adelante el caso de ‘un paso dado en dirección opuesta al de antes.’) Por fin, hay casos de elipsis admitidas en otros idiomas que no son admisibles en español; tal es la del complemento repetido para distinto verbo y con distinto régimen: en español no es correcto decir ‘me alegro de y te felicito por tu triunfo’, como podría decirse en inglés; hay que decir ‘me alegro de tu triunfo y te felicito por él’.

El caso más frecuente de elipsis de una oración entera ocurre en la oración condicional o hipotética. En primer lugar, va envuelta una elipsis en las expresiones como si y por si: ‘Te lo agradezco como (te lo agradecería) si lo hubieras hecho. Lo dice como (lo diría) si estuviera seguro. Se lo llevaré por (que lo tenga) si lo necesita. He traído dinero por’ (por ejemplo, ‘no encontrarnos en un apuro’) ‘si tú no lo traías’.

En realidad, toda oración independiente con el verbo en subjuntivo o condicional es una hipotética o condicional en que está elíptica la prótasis: ‘Aquí no estarías bien (Si te colocaras aquí…). Me hubiera gustado ir (si hubiera sido posible). Yo le hubiera vuelto la espalda (si me hubiera dicho eso)’. Otras veces, en exclamaciones, es la apódosis la que se suprime: ‘¡Si supiera dónde está… ! ¡Si te fueras de una vez! ¡Pero si está lloviendo!’(en las cuales pueden considerarse inexpresas, por ejemplo, las oraciones ‘estaría más tranquilo, qué tranquilo me quedaría’ o ‘¿cómo vamos a salir?’, respectivamente).

Aunque sea propiamente elipsis de pronombre, conviene mencionar aquí también la del pronombre con preposición, como en ‘de clase intermedia entre caballero y artesano’, frase que en forma completa sería ‘de clase intermedia entre la de caballero y la de artesano’, ya que la clase no puede lógicamente ser intermedia entre caballero y artesano; o en ‘de forma parecida al clavel’, que, completa, sería ‘de forma parecida a la del clavel’, ya que no se dice de una forma que sea parecida a una cosa. Este tipo de elipsis de pronombre formado con preposición puede llegar a ser completamente incorrecta gramaticalmente cuando envuelve una falta de concordancia: ‘Un paso dado en dirección opuesta al de antes’; lo opuesto es la dirección y no el paso y, por tanto, no cabe decir al de, pronombre que está formalmente referido a paso; en forma completa habría que decir ‘a la del de antes’, construcción que resulta enredada por la acumulación de partículas; cabe evitar este inconveniente dando otra forma a la frase: ‘en dirección opuesta a la del anterior’; o, al menos, suprimir una partícula sustituyéndola por el participio: ‘En dirección opuesta a la del dado antes’.

Igualmente, aunque esta elipsis es propiamente de verbo y corresponde tratarla en verbo, no sobra aludir aquí al caso de elipsis del participio adjetivo o de la oración adjetiva correspondiente; como en ‘se suprime el acento encima de la i’ (colocado, que se colocaría, encima de la i).

Corresponde mencionar aquí también el caso en que la elipsis del verbo arrastra la de otros elementos de la oración a que pertenece, de modo que ésta queda reducida a un complemento suelto, a veces un mero adverbio: ‘Tenía buen humor, pero no siempre’ (pero no siempre tenía buen humor).

Fuente: Diccionario María Moliner de uso del español